Funciones Ejecutivas
Las funciones ejecutivas son un conjunto de procesos cognitivos que permiten un comportamiento flexible y adaptado al contexto. El enfrentarse con una situación nueva o compleja, como, por ejemplo, entender la causa de un desperfecto repentino en el auto, planificar el arreglo del jardín, elegir el mejor itinerario de un viaje, o ganar un juego de ajedrez, requieren en grado sumo de las funciones ejecutivas, en alguna de sus modalidades de razonamiento: inferencial, analógica o automática.
- El razonamiento inferencial funciona por la emisión de hipótesis y deducciones, es el modo hipotético-deductivo. Se utiliza cuando uno se enfrenta a una situación nueva para la cual no se cuenta con ninguna solución disponible. Uno está obligado entonces a considerar todos los elementos del problema, deducir una solución y/o desarrollar teorías posibles para encontrar una solución.
- El razonamiento analógico implica "reciclar" una solución hallada previamente para un problema que presentaba características comunes con el problema actual .
- El razonamiento automático consiste en aplicar espontáneamente una solución bien conocida en situaciones familiares (como realizar el trayecto hasta la panadería). Es posible gracias a la aplicación automática del conocimiento almacenado en nuestra memoria. Estas situaciones demandan muy poca atención y movilizan pocos recursos cognitivos.
Elaborar una estrategia de razonamiento
Las siguientes son los pasos necesarios para elaborar una estrategia de razonamiento hipotético-deductivo.
- Análisis del problema y definición del objetivo a alcanzar
- Elección de una estrategia -determinación del plan de acción para resolver el problema.
- si el objetivo final es demasiado difícil de alcanzar en una sola etapa , se definen sub-objetivos intermedios, haciendo más fácil avanzar hacia la solución final
- se toman en cuenta los medios disponibles para alcanzar el objetivo, así como las posibles complicaciones o impedimentos - Elección de una solución entre las varias soluciones posibles
- Verificación de la validez del resultado obtenido comparándolo con el análisis inicial
Otras habilidades cognitivas implicadas en el razonamiento
Atención: Para resolver un problema es necesario focalizar la atención en toda la información disponible para luego seleccionar los datos más relevantes. La atención también permite ignorar todas las interferencias que podrían perturbar el proceso de razonamiento. Permite, además, dejar a un lado las respuestas automáticas que han sido generadas por el cerebro pero que no son adecuadas para la situación actual.
Ejemplo: Detenerse frente a la luz roja del semáforo cuando hay un policía que nos está haciendo señas para que avancemos.
Memoria: La memoria de largo plazo está particularmente implicada en el razonamiento, ya que usamos planes de acción almacenados en nuestra memoria para resolver un problema nuevo. La memoria de trabajo también interviene y nos ayuda a mantener en la conciencia los elementos esenciales del problema y trabajar sobre los varios elementos disponibles, como una serie de cifras durante un ejercicio de cálculo mental.
Imaginería mental: La habilidad de crear una imagen mentalmente contribuye también de manera importante a un proceso de razonamiento efectivo. Nos permite crear, imaginar, o anticipar futuras movidas en una partida de ajedrez, mantener la información en la mente para comparar situaciones, o realizar una rotación mental de los objetos para decidir, por ejemplo, si un ropero entra en determinado espacio.